MI IDEA PERSONAL :
Creo que de sobra es conocida mi afición por las novelas históricas de temática nazi y segunda guerra mundial, por eso "La voz de los valientes" me llamó la atención y estuvo en mi lista de deseos desde que se estrenó, además su autor, Rafael Tarradas Bultó, había publicado anteriormente 2 novelas en las que también me fijé pero que al final no pude leer. En esta ocasión se me logró y aunque por la extensión del libro y por la reiteración de temática tuve que posponer más de lo que me hubiese gustado, al final "La voz de los valientes" encontró su momento.
La novela en su inicio nos sitúa en Baviera en 1939, en uno de los muchos impresionantes castillos de la zona, ocupados por familias que hasta el momento habían sido importantes pero que precisamente en estos instantes comienzan a ser parias desahuciados por un régimen en ascenso y que no perdona el hecho de ser judíos. Como en cualquier desgracia aparecen infinitas posibilidades para la rapiña que simpatiza con el poder.
En una tercera persona la narración nos va introduciendo diferentes personajes, inicialmente vivimos la huida de la familia Wiesner, todo un transitar de supervivencia donde encuentran lo peor y se agradecen la aparición de personajes que aún distingan lo correcto y ofrezcan una mano amiga en la que confiar, confianza ciega exigida por la situación y que a veces les llevará a lamentar esa ayuda.
Precisamente esta huida me ha resultado diferente, ya que estamos hablando de familias con mucho poder adquisitivo, circunstancia que puede facilitar las cosas pero que no es un salvoconducto porque la caída dará paso a que otros se queden con todo lo que tienen.
Un giro de argumento me hizo temer que no volviese a saber nada de la familia, pero no es más que la tensión que introduce el autor para que posteriormente las tramas se vayan encontrando.
"Para que el mal triunfe basta con que los buenos no hagamos nada" Pág. 69 y 180.
La novela nos ofrece un amplio abanico de personajes que crean diferentes subtramas localizadas sobre todo entre Alemania, que inicia guerra, y España recién salida de su guerra civil y donde las intrigas para que se posicione hacen que numerosos espías y observadores de ambos bandos se camuflen en el devastado país.
"Su amistad, como todas las verdaderamente importantes, era capaz de esperar sin acusar el tiempo" Pág. 166
"Si quieres hacer reír a Dios, cuéntale tus planes, siempre tiene otros preparados" Pág. 167
También tendremos localizaciones en otros puntos del mapa, sobre todo en la Frontera de Francia con España, punto caliente para el paso de los que huyen.
En realidad dentro de todos los personajes no podemos destacar a un protagonista, sino que serán varios los que lleven el peso de la novela, respecto a la parte española tenemos a Inés, Pablo y José Manuel , y en tierra teutona otros tantos como Hilda, Heidi...
Las diferentes tramas van creando una gran historia donde prima la supervivencia, pero esta vez es contada desde los que no se conformaron con no hacer nada, sino que decidieron alzar la voz y convertirse en "La voz de los valientes", un compromiso que cada uno desde su propia situación puso al servicio de los más necesitados, lo que nos permite leer una novela con grandes dosis de intriga, emoción y espionaje. Precisamente este espionaje me ha gustado por ser sencillo, a veces las incursiones y compromisos más insignificantes podían derivar en una ayuda inestimable para un bando u otro, como la abuela de Inés, una señora que no merecía la atención para el Reich pero que las mataba callando debido a una antipatía por los engreídos alemanes.
En la narración a pesar de ser ficción, se mezclan personajes reales que aportan un entorno muy absorbente, especialmente destacado por las fastuosas fiestas de la sociedad Alemana del momento donde se mezclan las familias con historia junto a los nuevos poderosos que han podido medrar en la guerra.
El espacio temporal de la novela es amplio, ya que abarca desde los albores de la II guerra mundial hasta su finalización. Este abanico lo permite una buena extensión para una novela histórica, una novela que hay que tomar como lectura tranquila ya que a pesar de tener pasajes con gran ritmo, tiene bastante contenido y exige una lectura pausada y atenta.
Esta reflexión , no es más que el sabor de boca que deja un libro a un lector aficionado cuando cierra la última página y que decide compartirlo con vosotros.
Pues tomo buena nota, que esta ambientación suele gustarme y tiene buena pinta.
ResponderEliminarBesotes!!!
Gracias Margari. Besos
ResponderEliminarHola Álvaro!!
ResponderEliminarNo conocia este libro, gracias por la recomendación.
Besos💋💋💋
Gracias Ella. Besos
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